No es su primera experiencia en unas Olimpiadas, pero quizás la más especial: los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 son los primeros que se celebran en Sudamérica y Alex Figueroa Cancel, periodista de GFR Media y profesor de Periodismo de Sagrado, está allí para contarlo.
Por Comunicaciones Integradas
Desde Río, explica cómo es el día a día en esta carrera informativa y cómo se beneficiarán de sus experiencias los estudiantes de Sagrado.
Pregunta. ¿Cómo está siendo tu experiencia en Río 2016?
Respuesta. La experiencia de cubrir los Juegos Olímpicos de 2016 en Río de Janeiro es maravillosa por muchas razones.
Por su puesto, lo primero es el elemento deportivo, con tantas historias que surgen de las competencias con los principales deportistas de planeta
Como si eso fuera poco, entonces tienes los elementos que hacen únicos estos Juegos. Para empezar, son los primeros Juegos Olímpicos en Suramérica.
Entonces, tienen como sede a Brasil, que ha vivido momentos de tantos cambios en su historia desde que se adjudicó la sede, hasta estos instantes en que se desarrolla la máxima fiesta del deporte del mundo. Estar en el “lugar de los hechos”, además, te permite sentir el pulso de la gente que vive en los alrededores de los estadios, de manera que tienes la perspectiva más allá de los resultados deportivos.
Aparte, estás en primera fila para ver el desempeño de los atletas de Puerto Rico, en las buenas y en las malas, dando su máximo esfuerzo.
P. ¿Qué significa para ti estar cubriendo los Juegos?
R. Lo considero un gran honor por tratarse de un momento histórico al que tengo la oportunidad de asistir. Al mismo tiempo, se siente la gran responsabilidad que conlleva, porque no solamente tienes que cumplir con la misión del medio, sino que estás manejando una información de alta demanda de parte del público.
P. ¿Qué particularidades destacarías en la cobertura? ¿Cómo es el día a día en Río?
R. Es un evento de muchos retos para la cobertura periodística. Es cierto que la organización te provee accesos para que puedas presenciar las competencias y luego unos espacios para realizar entrevistas. Fuera de ahí, hay una inmensa cantidad de restricciones que influyen mucho la rutina de trabajo. Muchas veces, esas restricciones te limitan cuando quieres satisfacer las exigencias del público que está pendiente a lo que publicas en las diferentes plataformas del medio.
Relacionado a esto, entonces, tienes el asunto de los traslados de una competencia a otra cuando tienes que cubrir más de un evento. El día a día en estos Juegos de Río implica utilizar el transporte que provee la organización para atravesar el tránsito carioca, que de por sí suele ser complicado, para llegar de una sede a otra. Mientras, cuando te tienes que mover entre las sedes del Parque Olímpico, el trayecto es más corto, pero igualmente tenso por haber otros miles de trabajadores de los medios en la misma situación.
No obstante todo lo anterior, el esfuerzo resulta muy gratificante cuando logras llevar las historias que recogen lo más importante de lo que acontece y satisfaces la necesidad informativa del público.
P. ¿Cómo crees que te beneficia esta experiencia para desempeñar tu función como educador en Sagrado?
R. Definitivamente haré lo posible de que esta experiencia sea de beneficio para los estudiantes que tenga la oportunidad de tener mi salón.
Todas las experiencias son diferentes y nunca se puede pensar que lo has visto todo. En el pasado he trabajado con Juegos Centroamericanos y del Caribe, Panamericanos y en las Olimpiadas de 2012 en Londres, y cada uno ha sido un mundo de lecciones.
De un lado, por ejemplo, tienes el aspecto de la planificación de la cobertura, la conceptualización de las historias, el reto constante a la creatividad, la necesidad de reaccionar a lo inesperado, los ajustes sobre la marcha, la valorización de los elementos que te encuentras por el camino y el trabajo en equipo con los colegas y jefes, para que la suma de todo esto y otros aspectos terminen convirtiéndose en las informaciones que se llevan al público.
Por otro lado, está el aspecto de cómo adaptar todo ese flujo informativo a través de las diversas vías de comunicación. Desde hace años el Internet cambió las reglas del juego y ahora todos tienen/quieren los resultados al instante. Así que también estás en un constante balance de atender esas audiencias sin que se afecte el desarrollo de la información.
Al final, espero que esos pasos andados puedan servir de herramienta para los estudiantes.
P. El año pasado publicaste El camino al Cerro Pelado, una investigación histórica sobre la oposición del gobierno de Puerto Rico a la participación de Cuba en los X Juegos Centroamericanos en 1966. ¿Qué te llevó a hacer esta investigación?
R. En un inicio fue una asignación para una monografía en clase de Historia, pero el tema me pareció fascinante desde el principio. Me cautivó tanto que lo desarrollé durante varios años hasta que se convirtió en mi tesis de Maestría. Afortunadamente, lo pude redactar como si fuera un gran reportaje, por lo que ese mismo manuscrito al final pudo convertirse en el libro.
P. La investigación está relacionada con un evento deportivo, ¿es tu tema predilecto?
R. En síntesis, la historia me capturó porque involucra un tema que me apasiona, que es el asunto de la identidad nacional reflejada a través del deporte. Pese al comienzo conflictivo de la historia, al final significó el triunfo más grande que haya tenido el deporte sobre la política en Puerto Rico y fue gracias al poder que tiene el deporte a través de la identificación que tienen los puertorriqueños con su representación deportiva internacional en el olimpismo.
P. ¿Qué características crees que deben tener los estudiantes de periodismo que pretenda dedicarse al periodismo deportivo?
R. Además de fanático y conocedor de los deportes, debe asegurarse de cultivar lo que requiere la profesión del periodismo: Cultura general… mucha cultura.
A veces se piensa que con saber las reglas de un deporte y saber comunicar el marcador final, ya es suficiente. No es así. Los resultados de las competencias no ocurren en el vacío. Se producen por protagonistas que tienen su trasfondo social particular que influye en su desempeño. Se desenvuelven en un momento social y económico determinado, en el que se desarrollan situaciones que ayudan o afectan.
Entonces, tienes a los espectadores, esos “jueces” que emiten su fallo a través de la opinión pública, a la vez que responden a sus propias concepciones que tienen todos los seres humanos, para bien o para mal. Es en esas aguas, a veces tormentosas, en las que se desenvuelve el periodista deportivo que realmente quiere ejercer la profesión más allá de contar resultados.