Por Liz Yanira Del Valle
Colaboradora
“Fronteras de la lingüística cultural: funciones del lenguaje en la comunicación persuasiva” fue el título de la conferencia magistral impartida en Sagrado por el Dr. Guillermo Caliendo, profesor de Comunicación Empresarial en Tepper School of Business de la Universidad Carnegie Mellon en Pittsburgh.
Caliendo partió de la preocupación de cómo transferimos la comunicación de un lado a otro y de cómo persuadimos a nuestro receptor. El doctor en retórica y estudios en medios de comunicación, centró su conferencia en la importancia de la traducción en la comunicación y partió de los tres vectores culturales de la persuasión: la traductología, la equivalencia interpretativa y el lenguaje cultural.
“La traductología es relevante para la comunicación y más aún para la percepción ya que hoy todos somos traductores de una forma u otra. Diferentes significados pueden persuadir a comunidades enteras ya que lo traducido es influenciado por diferentes formas de interpretación y representación de un texto original. Hoy, especialmente con noticias falsas, vemos cómo lo traducido puede cambiar nuestro entendimiento y memoria de eventos y personas”, dijo el también doctor en Estudios Culturales.
Para Caliendo, los tres vectores mencionados influencian el cómo, cuándo y el por qué de la comunicación en un texto meta (texto traducido). Definió la traductología como el campo de estudio que proviene de la lingüística aplicada que surge a mediados del siglo XX. Sobre la equivalencia, explicó que va más allá de la lingüística pura y debe considerarse como una interpretación entre el texto original y el texto meta dentro de la cultura cotidiana. Enfatizó que su eficiencia consta entre las semejanzas de reacciones entre el emisor y el receptor.
“Lo importante de esta conversación es lo extralingüístico en el proceso de la traducción que influye en los estudios de los años 50 a los 90”, dijo tras citar a Eugene Nida quien ya en 1959 apostó a la noción de que una traducción no es tan absoluta.
“Esto implica que en la traducción de un idioma a otro puede haber pérdida de información en el intercambio de símbolos, tono y sentido. Más aún, el proceso de traducción está enmarcado, y yo diría legitimado, por el contexto sociocultural. Por ejemplo, el género, la sexualidad, lo étnico y las discapacidades”, apuntó.
El profesor ofreció un insumo de las aportaciones de lingüistas, traductores, filósofos, teóricos, académicos y escritores tales como, Humberto Eco, Octavio Paz, Roman Jakobson, George Steiner, Michael Foucalt, Bourdieu, con pertinencia en el tema y del cambio de paradigma dado a mediados del siglo XX con el postestructuralismo donde ya el lenguaje no es considerado puramente lingüístico.
“La reestructura del lenguaje, y por consiguiente su comunicación, va más allá de sus fronteras lingüísticas porque está en la entrecrucijada de las instituciones hegemónicas políticas, educacionales, religiosas, económicas y culturales: hábitos, valores, creencias.
La traducción y sus formas de comunicación son importantes ya que una vez que son aceptadas pueden adquirir una fuerza cultural muy profunda que en forma relevante pueden afectar no solo nuestro entendimiento si no también cambiar los mitos, rituales, hábitos y valores”, enfatizó.
Esta actividad se dio como parte del proyecto Encouraging Key Humanistic Competencies que dirige la decana de la Escuela de Comunicación Ferré Rangel, Dra. Nadesha K. González Nieves, y fue auspiciada por la National Endowments for the Humanities.