Lydimar Garriga Vidal, profesora del Programa de Trabajo Social de Sagrado, ofrece cinco consejos a los futuros trabajadores sociales del país.
Por Marla Figueroa Ramos
Comunicaciones Integradas
Cuando conoces a la profesora Lydimar Garriga Vidal, integrante del Programa de Trabajo Social de Sagrado, entiendes rápidamente por qué fue merecedora de uno de los galardones más importantes impartidos por el Colegio de Profesionales del Trabajo Social de Puerto Rico (CPTSPR), el premio Isabel Rosado Morales. Su conocimiento sobre la profesión, simpatía, amabilidad y compromiso confirman su vocación de servicio y la búsqueda de la igualdad y justicia social.
“Para mí fue una sorpresa y un honor muy importante recibir este reconocimiento. Ser nominada por mis colegas es una emoción muy bonita que asumo con mucha responsabilidad”, expresó Garriga Vidal.
Lydimar, quien cuenta con un bachillerato en Trabajo Social y una maestría en Trabajo Social Comunitario, está encargada de supervisar los cursos de prácticas profesionales de los estudiantes.
“En Sagrado tenemos un programa muy especial. El sentido de pertenencia entre los futuros colegas es bien grande. Cada semestre vemos grupos que presentan mucha cohesión entre ellos, lo que nos permite a nosotros como profesores ser facilitadores de una experiencia más cualitativa y personalizada. Esto nos ayuda a desarrollar ciertas destrezas de una manera más profunda. Es un proceso bien gratificante ver cómo los jóvenes comienzan un poco tímidos y luego los vemos finalizar los cursos seguros y empoderados”, comentó.
La profesora cuenta con diez años de experiencia y disfruta de su participación en la academia como guía de la nueva generación de trabajadores sociales de Puerto Rico.
«Disfruto mucho mi labor como profesora, es una experiencia muy enriquecedora que te permite continuar expandiendo tu vocación».
Siguiendo su rol como mentora, Lydimar nos presenta cinco claves que la han ayudado a desarrollarse exitosamente durante su destacada trayectoria como trabajadora social.
1.Sé organizado.
“Como trabajadores sociales tenemos diferentes funciones y enfrentamos retos propios de la profesión. Por eso, es importante mantenerte organizado para así cumplir con los acuerdos y compromisos que tenemos”.
2. Mantente atento e informado sobre las situaciones que ocurren en el país.
“Es nuestro deber estar documentado y conocer las situaciones que suceden a nuestro alrededor. Tenemos la responsabilidad de ser la voz de alerta cuando se ven situaciones que no deben ocurrir. Es nuestro deber buscar la justicia social y velar por los derechos humanos de todos los ciudadanos”.
3. Reconoce y cumple con los valores y la ética de la profesión.
“Como trabajadores sociales es importante que tengamos como norte nuestros valores profesionales y código de ética. No podemos dejar que nuestras opiniones o preferencias vayan por encima de nuestra práctica. Todo ciudadano merece reconocimiento, respeto y derecho a la justicia e igualdad”.
4. No tengas miedo de asumir posturas.
“El trabajador social debe ser la voz cantante cuando se encuentra ante situaciones que son incorrectas y que no deben ocurrir. Es nuestro rol denunciar injusticias y reclamar la equidad y los derechos para todos”.
5. Sé solidario.
“Al momento de ejercer tenemos que ser conscientes que el trabajo social es una profesión que se ancla en la solidaridad y el respeto a los demás, sin esta base no podríamos llevar a cabo nuestra labor efectivamente”.
Tú también puedes ser exitoso en el trabajo social y hacer la diferencia.