«En algún lugar algo increíble espera ser descubierto”, decía el científico Carl Sagan. Ciencia es la curiosidad que nos lleva a hacernos grandes preguntas y, a veces, a construir grandes respuestas.

Por Antonio Vantaggiato
STEMmED II: House of Science
Con cuestionamiento crítico y rigor en la razón, estudiamos el universo y hacemos ciencia. No sólo aplicamos esas respuestas a la medicina y a la salud, sino también a la tecnología, al arte, a todo el quehacer humano.
Detrás de las maravillas de la Web y de Internet, está la ciencia de la programación y de computadoras.
Detrás de cada WhatsApp hay cientos de programadores aplicando su creatividad y razonamiento a problemas específicos que pueden resolverse por medio de una tecnología innovadora. Detrás de la maquinaria compleja y costosa o de robots para operar cirugías, trabajan ingenieros y científicos que aplican su conocimiento de biotecnología para el bien de los humanos.
Detrás de cada programa en telecomunicación o televisión hay personas especializadas en animación, simulaciones, análisis de datos, gráficas y efectos especiales. Hasta los matemáticos —¡quién lo diría!— andan por los pasillos de las grandes empresas estudiando modelos de negocio, analizando inversiones y datos para prevenir el próximo colapso económico o resolviendo, con su lenguaje universal, problemas imposibles de entender con otros medios.

Las carreras en ciencias producen hoy empleos sumamente interesantes y bien remunerados: el salario medio en Estados Unidos para un programador de la web es de $67,000, en un campo que crece a un ritmo de 20 por ciento.
En química, además del interés en investigación, se generan empleos en la industria de la salud y farmacéutica. Hoy día es posible fundar una microempresa y convertirse en emprendedor con muy poca inversión y equipo, en muchos casos solo basta con tener computadoras, interés y perseverancia. Los jóvenes que fundaron Google transformaron la industria de la publicidad desde su dormitorio en una universidad y ¡son programadores! Lo fascinante es que la programación permea todos los campos de trabajo.
Todos nacemos científicos, con nuestra innata curiosidad y el afán de obtener respuestas a muchas de nuestras preguntas. Hay más oportunidades de lo que imaginas. ¡Adelántate al futuro! Oriéntate, busca información y atrévete a estudiar una carrera en ciencias.
Para los que aceptaron el llamado y se matricularon en Sagrado, tenemos un modelo tecno-pedagógico sumamente efectivo y completamente centrado en el estudiante. El modelo STEMmED (Educación en Ciencias): cada estudiante de nuevo ingreso en ciencias (STEM) tiene a su alcance un mentor que lo apoya en su primer año, participa de un PREP-Week preparatorio para la vida universitaria en agosto; y recibe tutorías gratuitas durante todo el año. Además, se le da la bienvenida con laboratorios completamente remodelados y equipo de primer orden; con cursos medulares de ciencias que han sido rediseñados; y con posibilidades muy concretas de investigación.
Y, por supuesto, con una facultad muy comprometida, preparada y disponible.