Profesores de Psicología y Ciencias Sociales ofrecen conferencia para crear consciencia sobre el autismo.
Por Brandon García Alvarado
Estudiante de Publicidad
En conmemoración con el día nacional del autismo celebrado en el mes de abril, profesores de Psicología y Ciencias Sociales invitaron a la comunidad universitaria a compartir sobre las realidades del autismo. También se brindaron recomendaciones sobre los métodos de enseñanza que promueven integrar los intereses de personas con esta condición.
Retos y cualidades
Según la organización Autism Speaks el autismo se define como un rango de condiciones caracterizado por retos de destrezas sociales, comportamiento y comunicación causado por diferentes combinaciones de influencias genéticas y ambientales.
La profesora Rosalie Lopéz, quién impartió la conferencia, expresó que “a temprana edad se les ubica erróneamente como estudiantes con retraso mental”, haciendo referencia a que debido a sus retos en la comunicación y socialización, elementos
claves en la construcción del conocimiento, se cometen estos errores.
Se destacó que no todas las personas con autismo poseen los mismos padecimientos, ya que este se rige por un espectro. Comenzando con el nivel uno, dos y tres, siendo el último el más severo y en el cual resaltan más las características de esta condición.
Además, algunos jóvenes adquieren hipersensibilidad auditiva, problemas de organización y planificación, lo que les crea ansiedad si se encuentran en situaciones con demasiada información. Como resultado, crean conductas de auto estimulación conocidos como hand clapping movement o movimientos involuntarios de las manos, para lidiar con el estrés.
Sin embargo, algunos de sus retos resultan ser sus mejores fortalezas, ya que su sensibilidad y gran enfoque en temas de su interés les permite dotarse en áreas como música, matemáticas, ciencias y en el idioma inglés.
Estudiante que llega a la universidad
El estudiante con autismo que llega al nivel universitario puede sentirse abrumado por la gran cantidad de estímulos visuales y auditivos, pero a esta edad muchos han logrado adquirir métodos para controlar sus respuestas ante el estrés.
“Estos estímulos son iguales que un viernes negro en Plaza las Américas, too much information!” expresó López.
Además, pueden tener un poco de dificultad con romper el hielo al socializar, por lo que se recomienda una técnica de shadowing, en la que con el consentimiento de un consejero o psicólogo se le puede asignar un estudiante líder que le sirva de ejemplo a seguir y le facilite adquirir destrezas de socialización.
Cómo ayudarlos en clase
López le recomienda a los futuros educadores a identificar estos estudiantes en sus respectivas clases y crear asignaturas audiovisuales, como las películas. Lo que logrará ayudarlos a comprender el material de manera fácil y entretenida.
Además, les pide desarrollar estrategias de lenguaje para trabajar con estos estudiantes. Los lenguajes prácticos, sencillos y visuales son los preferibles para ayudarlos a asimilar el tema que se está explicando. Por ejemplo, el lenguaje de señas posee estas tres cualidades y es el más recomendable a la hora de captar su atención.
“¡La cantaleta no funciona!” expresó López, haciendo referencia a los movimientos involuntarios. Por lo que se recomienda motivar la práctica de ejercicios de estiramiento y utilizar pelotas de stress que alivian los padecimientos.
Entre otras sugerencias, está crear un documento en PowerPoint con poca información, presentar recursos de manera creativa para las tareas, aprendizaje a través del juego y realizar pictogramas del área de interés para identificar sus fortalezas. Sobre todo, la misión del educador debe ser establecer un ambiente de inclusión y ayudar a encontrar las pasiones de sus estudiantes para encaminarlos hacia el éxito.
“Quiero que vean que el joven con autismo no es diferente a nosotros pero necesita de unas estrategias para que ese talento que tú tienes el también lo pueda desarrollar” concluyó la profesora.