Iván Calderón Rivera trabaja entre cómputos y música por Sagrado | inSagrado

Iván Calderón Rivera trabaja entre cómputos y música por Sagrado

El «web master» de la universidad relata cómo logró convertirse en el director de la agrupación musical Segreles.

Iván Calderón Rivera, «web master» de Sagrado. (Foto suministrada)

Por Liz Yanira Del Valle
Colaboradora

Nota: Este es el tercer artículo de una serie especial con motivo del 140 aniversario del proyecto educativo Sagrado Corazón.

Iván Calderón Rivera es un sagradeño muy particular. Probablemente el más musical y cafetero de todos. Me lo presentaron hace mucho tiempo en su oficina, donde abunda el café y las insignas tuneras. Ahora el encuentro es telefónico e imaginamos el intercambio de aromas cafeteros.

Para comenzar, Iván no es un exalumno. Sin embargo, ha puesto a Sagrado en las tarimas de muchos países de América y Europa. Pues, Calderón Rivera se destaca como el director de la agrupación musical Segreles, fundada en febrero de 1993 por exalumnos de Sagrado. Eso es vox populi en el campus.

“Cuando era pequeño participé de una tuna en Comerío, de donde soy natural”, recordó. Además, resaltó que la misma era dirigida por su fenecido padre, Esteban Calderón.

Lo que quizás pocos saben es que el tuno mayor también es el web master de la universidad.

Iván “Segreles” -porque ya casi pierde su apellido- cursó estudios en la Escuela Superior Juana Colón, en el barrio Pasarell de Comerío. Al graduarse se enfrentó con decisiones no muy fáciles de tomar.

“Era tranquilo y disciplinado. Me gustaba aprender, pero no tenía claro lo que quería estudiar, si Ciencias Naturales o Cómputos”, confesó Calderón, quien obtuvo un bachillerato en Sistemas de Información.

Al graduarse, realizó trabajos de contabilidad, fue profesor de Ciencias de Cómputos en Bayamón y laboró en el centro de cómputos de una subsidiaria de Bacardí.

Buscando algo menos árido, pidió consejos a su madre, Lydia Rivera, quien de inmediato lo puso en oración ante el Sagrado Corazón de Jesús.

“Fue como una señal divina, pues me enteré de una oportunidad de entrevista en la universidad. En ese momento (1990) existían dos centros de cómputos, uno académico y otro administrativo. Fui al académico. Pasé dos entrevistas y entré en enero del 1990 como programador de sistemas”, detalló.

Sagrado fue un regalo, una oportunidad de explorar y de encontrar nuevas dimensiones personales y profesionales. Cuando fui por primera vez al campus, me sorprendió encontrar un pequeño oasis en Santurce que no sabía que existía”.

Iván Calderón Rivera, web master de Sagrado

Durante todo este tiempo, Iván ha realizado diversas funciones en la institución. Fue Coordinador de Operaciones. Luego, dirigió por seis años el Centro de Cómputos Académicos.

Calderón no olvida que entre las primeras páginas de internet publicadas en Puerto Rico se encontraban las de Sagrado y Segreles. “Era como un experimento, pedí un auspicio a Apple y comencé a inventar”, agregó.

Según este profesional, cuando el Decanato de Asuntos Académicos fue ocupado por el Dr. César Rey, se unieron los dos centros de cómputos.

“Era algo digamos autosustentable, pues dábamos el propio mantenimiento. No se contrataban compañías externas. Los estudiantes participaban. Por allí pasaron alumnos que hoy son destacados profesionales en la industria”, expresó.

Según pasó el tiempo, la tecnología fue avanzando y con ella Calderón también progresaba. “La página web comenzó a tomar auge. De ahí surgió el título de web master bajo el Decanato de Asuntos Académicos. Mi puesto se cambió a lo que era la oficina de Planificación, bajo Lydia Planell. Ahora, laboro bajo la oficina de Comunicaciones Integradas”, resumió el informático.

Le pregunto cómo saltó del teclado de una computadora al escenario con Segreles y relató lo siguiente: “Sagrado tenía su tuna universitaria. Como todo, cuando terminas de estudiar te salías de la agrupación. Fue Ernesto Rivera, un exalumno sagradeño quien persistió en lo musical, así que reunió a otros egresados de Sagrado y fundó a Segreles”.

En el 1994, Segreles se presentó en el Festival Internacional de Tunas (FIT), que tuvo lugar en San Juan. “Ví la presentación y me pareció bien interesante. Allí me reconocieron como empleado de Sagrado e intercambiamos impresiones. Me invitaron a participar y ahí estoy desde el 1994”, explicó.

“En el 1997, el director de la agrupación se mudó para Estados Unidos. Fue así como orgánicamente inicio a presidir el grupo”, abundó Iván.

Iván Calderón Rivera, director musical de Segreles.
(Foto suministrada)

Para este intérprete del cuatro, Segreles es muy particular, ya que a la veintena de sus integrantes los enlaza una red de amistad, lo que les ha permitido sobrevivir por tanto tiempo.

“Nos une la pasión por la música. Queremos innovar. Segreles tiene una voz propia y distinta, la cual se refleja en su repertorio con piezas de la música española, latinoamericana, puertorriqueña y popular con arreglos de voces e instrumentos (cuerda, percusión y viento) que los caracterizan”, subrayó con orgullo.

Iván Calderón Rivera, director musical de Segreles

Los cómputos pueden llevar a Calderón Rivera a donde desee. Al menos, deja saber que en su cotidiano otros le preguntan porqué no busca trabajo en Estados Unidos. Él responde que no todo es dinero. Pudiera ganar más, pero tendría que dejar atrás a Segreles.

El Sagrado Corazón de Jesús trajo para este boricua otras bendiciones.

“En Sagrado he tenido la oportunidad de trabajar en cosas que no conocía y que encontré que me apasionan y en las que creo. Al comenzar a trabajar en la universidad, muy pronto, Sagrado se convirtió en una familia y se reafirmó nuevamente al darme la oportunidad de adoptar allí a Segreles”, concluyó.

Scroll al inicio
Ir al contenido